Foto: Ketevan Kemoklidze como Angelina. Credito: Robert Millard
Desde
su estreno en en la Opera de Houston en el 2007, el
montaje escénico del grupo teatral catalán Els Comediants
ha recorrido muchos teatros importantes del mundo, incluido el del Liceu de Barcelona donde
se realizó una grabación en DVD, y su arribo al escenario de Los Ángeles coincidió con la reposición de una obra que a nivel loca fue vista por última vez en el año 2000. El colorido y la brillantez de los
vestuarios y los diseños de Joan Guillen, concebidos como un comic, aunados a la puntual dirección escénica de Joan Font no han perdido su vigencia
y continúan resaltando la gracia de la trama y la efervescencia
musical de
la obra. La
mezzosoprano Ketevan Kemoklidze
despuntó
como una sensible y efectiva intérprete del papel de Angelina, y mostró
ligereza, color y agilidad en su voz, con la que cautivó a un público que la
premió efusivamente. El tenor de origen mexicano René Barbera fue un discreto Don Ramiro en su actuación, pero dejó en evidencia sus
cualidades vocales para este repertorio. Alessandro
Corbelli
demostró el dominio que tiene del personaje de Don
Magnifico
al que actuó de manera burlesca, hilarante y original, y que cantó con seguridad y
atrevimiento. Vito Priante
sobreactuó innecesariamente al papel de Dandini,
pero lo compensó con virtuosísimo vocal, y Nicola Ulivieri
dio vida a un correcto Alidoro
con su profunda voz de bajo. El coro tuvo una participación digna de
resaltar, asi como las hermanastras Tisbe y Clorinda, intepretadas por Ronita Nicole Miller y Stacey Tappan, respectivamente.
Por
su parte, la orquesta tuvo un desempeño desigual de la mano de su titular James Conlon,
cuya lectura tuvo tiempos lentos y letárgicos que
causaron algunos desfases con la escena en
el primer acto; pero que estuvieron mejor calibrados, dinámicos y melodiosos en
el resto de la función. RJ
No comments:
Post a Comment
Note: Only a member of this blog may post a comment.