Foto: Amati Bacciardi
Massimo Viazzo
La tercera
propuesta del ROF 2013 fue la reposición de la histórica producción de la farsa
juvenil L’occasione fa il ladro, firmada por Jean Pierre-Ponnelle,
creada aquí en Pesaro por el director frances en 1987, una año antes de su
muerte. Ponnelle (aquí repuesto por Sonja Frisell) exhibió una consanguinidad
casi total con la música de Gioacchino Rossini.
Todo estuvo sincronizado como en un perfecto mecanismo de reloj, sin
exageraciones ni invenciones en ámbitos súper modernos. Cuando se tienen las
ideas, puede ser suficiente solamente una valija para hacer teatro. Es
justamente de una valija (el subtitulo de la opera es por cierto Il cambio della valigia) que durante la
sinfónica introductoria, aparecen las escenografías voladoras, los elementos escénicos
y los personajes de carne y hueso. Divertido. Todo sin ser forzado, con suma
gracia y naturaleza. Al final de la
farsa, todo se ordenó milagrosamente como al inicio, y la famosa valija se
tragó todo. El elenco fue dominado por el Don Parmenione del experto Roberto de Candia y por el muy
simpático Martino de Paolo Bordogna,
un verdadero deus ex – maquina de la
obra, casi un precursor del Poeta en el Turco
in Italia, y es quien tiro los hilos de la trama construyéndola y
descomponiéndola a su gusto. La Berenice de Elena Tsallagova mostró sus mejores dotes en el canto más lírico e
intimo, mientras que Enea Scala
interpretó un conde Alberto determinado y apasionado. Por su parte, la
Ernestina de Viktoria Yarovaya tuvo
algunos problemas de entonación, mientras que el Don Eusebio de Giorgio Miseri fue preciso y
pertinente. Al final, pareció un poco monocorde la dirección de la china Yi Chen-Li al frente de la Orchestra G.
Rossini.
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