Mirco Palazzi, originario de Rimini en Italia, es un joven y destacado bajo que comenzó a muy temprana edad sus estudios de piano para después dedicarse al cantó donde finalmente se diplomó con honores en el Conservatorio Rossini de Pesaro. Después de ganar importantes concursos de canto, debutó profesionalmente en la opera Don Giovanni de Mozart en el festival Música Riva Festival en Riva del Garda. Su prolífica carrera que lo ha llevado a presentarse en los teatros más importantes de Italia como: Teatro alla Scala de Milán, Regio de Parma, Comunale de Boloña, Alighieri de Ravenna, Bellini de Catania, Carlo Felice de Génova, San Carlo de Nápoles, Regio de Torino, Maggio Musicale Fiorentino de Florencia, Festival de Spoleto, Teatro delle Muse de Ancona, Opera de Roma, Rossini Opera Festival de Pesaro, Teatro la Fenice de Venecia, entre otros. En el extranjero se ha presentado en el Festival de Wexford en Irlanda, Festival de Edimburgo, Staatsoper de Stuttgart, Grimaldi Forum de Monte Carlo, St. John´s Smith Square de Londres, Concertgebouw de Ámsterdam, en el Teatro del Liceu de Barcelona, y en Aviñón, Berna, Lieja, Leipzig, Japón y México, por mencionar solo algunos lugares, donde ha interpretado un amplio repertorio de obras, particularmente del genero belcantista. Cuenta además con un vasto catalogo de grabaciones discográficas y muchos compromisos a futuro, como su debut en las operas de Dallas y Washington en Estados Unidos. En esta breve entrevista, Mirco amablemente nos reveló algunos secretos sobre su carrera.
Ramón Jacques
¿Cuando decidiste hacer del canto una carrera y como fueron tus inicios?
¿Cuando decidiste hacer del canto una carrera y como fueron tus inicios?
Descubrí el canto casi por casualidad en las lecciones de canto coral previstas en el estudio del piano, que era mi instrumento principal. Mi maestro de canto coral se dio cuenta de mi voz, que estaba impostada de manera natural, y me aconsejó estudiar canto porque, de acuerdo a el, yo poseía las cualidades. A partir de ese momento inicié casi por diversión y nuevo entusiasmo el estudio del canto inscribiéndome en seguida en el conservatorio de Pesaro donde obtuve el diploma de canto bajo la guía de tenor Robleto Merolla. El canto se convirtió en una carrera a raíz de que gané tres concursos internacionales (Tagliavini, Zandonai y Masini), y desde ese momento es cuando de hecho entre en el “mundo” profesional y con la ayuda de una agencia que se fijo en mi en el concurso “Masini” de Reggio Emilia.
¿Cómo te definirías vocalmente?
Si hablamos del registro vocal, diría que soy un “cantante bajo”, pero en un sentido mas amplio, me siento un músico y poco importa para mi si se es bajo, barítono o tenor. La voz es para mí un instrumento que sirve para desarrollar y realizar la música que se interpreta, y esta es la que llega a la sensibilidad de quien la escucha. Me gusta mucho, y creo que del mismo modo le gusta también a mi voz el repertorio belcantista que abarca desde Rossini (sus operas serias sobretodo) hasta Donizetti y Bellini, y también le tengo mucho cariño a autores del siglo dieciocho como Haendel y Mozart.
Por cierto ¿Cómo nació ese interés tuyo por el estilo belcantista?
Fue una cuestión de sensibilidad y de naturaleza vocal, o para decirlo de manera más simple, es el repertorio en el cual me siento más a mis anchas desde diversos puntos de vista.
¿A quien no te ha escuchado cantar, que seria lo primero que le harías escuchar para que conociera tu voz?
Seguramente seria mas de una cosa, como un aria de Rossini, específicamente la de Lord Sidney del Viaggio a Reims, o un aria de concierto de Mozart que amo muchísimo que es “Mentre ti lascio”, o un aria de Donizetti del Diluvio universale: “Dio tremendo, onnipossente”. También le haría escuchar algo de música de cámara como el Don Quichotte a Dulcinee de Ravel.
¿Cuáles serian los papeles a los que te sientes mayormente ligado?
Siento muy unido al Conde Rodolfo de la Sonnambula de Bellini, que fue el primer papel relevante que canté en un teatro, por demás importante, y que fue el Regio de Parma. Otro papel en el que estoy identificado es Raimondo de Lucia di Lammermoor de Donizetti que he cantado en diversas ocasiones al lado de colegas excepcionales y en teatros importantes. Pero para concluir, un rol que ha permanecido siempre en mi corazón es el de Lord Sidney del Viaggio a Reims de Rossini, por las dificultades que me ha hecho afrontar y por las satisfacciones que ha terminado dándome después. Naturalmente no veo la hora de cantar los papeles de Leporello y Fígaro.
Diría que el de Raimondo en Lucia di Lammermoor que cantaré nuevamente el año próximo en mi debut en la Opera Nacional de Washington.
¿Cuáles son algunas de las producciones en las que has participado y que recuerdas con particular placer?
En particular, recuerdo con placer la Sonnambula en el Regio de Parma con la dirección artística de Pierfrancesco Maestrini y la Lucia di Lammermoor de Graham Vick en el Carlo Felice de Genova, función de la cual existe una grabación en dvd. Otra producción que me dejó un bellísimo recuerdo fue la de la Pietra del Paragone de Rossini con dirección de Gianni Marras. Afectivamente recuerdo siempre la Boheme con la dirección de Marco Pucci Catena, realizada en Catania, por además de haber sido mi primera Boheme, fue en esa esa opera y en ese lugar donde conocí a mi mujer, la soprano Raffaella Milanesi.
¿Existe algún cantante, director de orquesta o escénico que haya influenciado positivamente tu carrera?
Diría que si, y en particular fue el director artístico: Patric Schmid, una persona que creyó en mis cualidades artísticas mas que cualquier otro y me dio la oportunidad de grabar papeles de operas maravillosas para su sello discográfico “Opera Rara”. Lo conocí gracias a mi actual agente Marco Impallomeni, que en aquel entonces era solo un amigo y no había comenzado a hacer una carrera administrativa. Entre los cantantes que he conocido han habido muchos que han influenciado mi camino artístico pero también el personal, y esta mi maestro Robleto Merolla y el bajo Bonaldo Giaiotti. Entre los colegas admiro sobretodo al tenor americano Gregory Kunde.
¿Te ha sucedido algún hecho curioso sobre un escenario?
Si, una ocasión en una Lucia di Lammermoor en la escena inmediatamente después del famoso sexteto, el tenor en la ímpetu de la salida me hirió de verdad golpeándome la nariz con la empuñadura de la espada. Por fortuna no paso nada grave además de que me asusté y también resto de los colegas y el director de orquesta que vio toda la escena completa.
Finalmente ¿Tienes algunos proyectos en el futuro inmediato?
Si, entre los mas interesantes para mi se encuentran Demetrio e Polibio en el Rossini Opera Festival de Pesaro, y mi debut como Leporello en Don Giovanni de Mozart, en el que será mi primera presentación en Estados Unidos con la compañía de opera de Dallas.
No comments:
Post a Comment
Note: Only a member of this blog may post a comment.